El autor de
esta obra es Federico García Lorca, Él nació el 5 de junio de 1898 en Fuente
Vaqueros, España y falleció el 19 de agosto de 1936 en Víznar, España, fusilado
por sus pensamientos liberales. Su padre fue Federico García Rodríguez, un
hacendado, y su madre, Vicenta Lorca Romero, maestra de escuela que formó el
gusto literario de su hijo.
Fue un
dramaturgo y poeta español de la generación literaria de 1927, que se
distinguió por dos rasgos fundamentales; la expresión de los subjetivo (por uso
de metáforas) y la precisión de lo conceptual estudió derecho en la universidad
de granada donde conoció a sus amistades intelectuales que también formaron parte
de esta generación literaria.
Se considera
el poeta de mayor popularidad en la literatura española y uno de los mejores
dramaturgos del siglo XX. En 1931 se fundó el grupo teatral universitario La
Barraca que sigue vigente hasta hoy en día, algunas de sus obras más
importantes son Yerma (1934), casa de Bernarda alba (1936), el libro de poesía
“Sonetos de amor oscuro” (1936) y Bodas de Sangre. Esta última fue escrita en
1933, se trata de una obra trágica/romántica, el extracto a analizar
corresponde al Acto 2, cuadro 1 de la obra.
En el
fragmento que nos tocó analizar de la obra de Lorca el tema principal es la
evocación a la pasión entre la Novia y Leonardo.
La estructura
de la obra es la de una obra dramática trágica/romántica, escrita en prosas. Es
un diálogo entre tres personajes la Novia, Leonardo y la Criada. La obra en su
totalidad es un claro ejemplo del teatro
trágico griego ya que presenta las características básicas descritas por
Aristóteles en su “Poética”, las que son argumento, personajes, coro,
pensamiento, dicción y espectáculo.
En cuanto a
los apartados del fragmento dividiremos este en cuatro los que son:
Apartado 1:
Desde Dialogo 1
Hasta Dialogo 12
Subtema:
Reencuentro entre Leonardo y la Novia, y reminiscencia de su pasada relación.
En el primer
apartado ocurre el encuentro entre la Novia y Leonardo, por la irrupción de
este al vestíbulo. Leonardo intenta desmotivar el matrimonio hablando
sarcásticamente sobre la pureza de la Novia y la ingenuidad del Novio, mientras
que la Novia, quien recibe a Leonardo en enaguas, molesta recibe los
comentarios de Leonardo, los cuales reprocha. Y al mismo tiempo Leonardo en
este apartado trata de revivir las llamas pasionales entre él y la Novia al
decirle que recuerde el pasado que tuvieron juntos.
Apartado 2:
Desde Dialogo 13
Hasta Dialogo 16
Subtema:
Intervención de la Criada quien quiere evitar la tragedia
En el segundo
apartado interviene la Criada, donde actúa como la voz de la razón e intenta
que todo salga como debería ser correcto, yendo contra el sino, para que cesen
el hablar de su pasado y se evite recordar la pasión entre ambos. A esto la
Novia le encuentra la razón y reprocha a Leonardo que es un hombre casado y con
hijos, por lo que no debería irrumpir en la casa de otra mujer.
Apartado 3:
Desde Dialogo 17
Hasta Dialogo 21
Subtema:
Arrepentimiento de Leonardo por separarse de la Novia.
En este
apartado Leonardo le va a expresar a la novia todo su arrepentimiento por haber
contraído matrimonio y haber dejado su relación pasar. Leonardo busca convencer
a la Novia que no importa lo que pase, no importa lo que ella haga, la pasión
que hay entre ellos siempre va a estar presente. La Novia le responde que ella
en el pasado era una mujer sola y perdida que cayó en la atracción de un su
imponente figura, pero que ahora tiene orgullo (matrimonio) y se casara para
dejar ese pasado atrás. El matrimonio es usado por la Novia como una tapadera a
la pasión entre ellos. Lo que Leonardo
critica diciendo que querer sofocar este abrumador sentimiento es el peor
castigo que se pueden hacer.
Apartado 4:
Desde Dialogo 22
Hasta Dialogo 29
Subtema:
Represión de la tentación por parte de la Novia.
Este apartado
es clave porque nos demuestra la indecisión de la Novia. En esta sección la
Novia tiembla de placer por Leonardo. Y procede a describir las sensaciones que
le producía la lujuria que representaba Leonardo en ella. Pero la Novia decide
no sucumbir ante la tentación y por eso dice no escuchar a Leonardo (la
tentación) porque sabe que si lo hiciese ella lo seguiría porque ella se
embriagaba en una pasión, lujuria, que es tan fuerte que le cegaba su razón. La
Criada que visualiza se apresura a echar a Leonardo, para evitar un desenlace
no fortuito, a lo cual Leonardo responde diciendo que solo quería aclarar ese punto,
y procede a irse “aceptando” la boda de la Novia.
Nuestro
fragmento de la obra se ubica en el acto segundo cuadro primero, en la mañana
de la boda. El lugar donde se realizan los hechos del fragmento es en el zaguán
de la casa de la Novia. Los personajes que están presentes en este fragmento
son: Leonardo, la Novia y la Criada.
Es importante
destacar el nombre que se le da a al personaje de Leonardo. Primeramente este
es el único personaje que posee un nombre en la obra, lo que evoca su rol
fundamental en la obra junto con alejarlo de los estereotipos literarios que se
le dan al resto de los personajes al no poseer nombre. Además la connotación
del nombre de Leonardo, literalmente “fuerte como león”, se relaciona con el león,
por tanto se trata de un hombre atractivo a
las mujeres, que es rudo, apasionado y salvaje, que es hábil en el acto
sexual y es además capaz de usar la fuerza por defender su amor.
Leonardo abre
el fragmento con un diálogo que hace
alusión a la corona de que llevara la Novia en la boda. Usa una pregunta retórica
diciendo si será grande ésta, luego dice que no debería serlo, sino que a ésta
le sentaría una pequeña mejor. Esto es una ironía, ya que las coronas en la
bodas representan la pureza de la Novia, su intocable virginidad, y Leonardo al
decir que debería ser pequeña desea acentuar que en realidad no es tan pura
como dice serlo. Luego Leonardo en el mismo diálogo procede a burlarse la
ingenuidad del Novio, lo cataloga como un hombre inocentemente puro, que
desconoce el pasado “impuro” de la Novia, o que decide ignorarlo.
Luego después
de las acusaciones de Leonardo, aparece la Novia quien todavía está en enaguas
y con la corona de azahar puesta. Aquí claramente se nos presenta una ironía.
La Novia sale con la corona de azahar la cual es el símbolo de la pureza de la
Novia, ya que primeramente es el símbolo de la Novia en la boda y además la
flor del azahar se relaciona con la pureza y virginidad, mas pese a llevar esta
corona que la vincula con el Novio, esta sale en enaguas al frente de un hombre
que no es ni su padre ni su prometido, algo totalmente impensado en una mujer
comprometida. Lo chocante que es esta
imagen además se ve representado en la Criada que cuanto ve el vestuario con el
que estaba la Novia, procede de manera directa a decirle que no debería salir
así. La Criada está representando la voz de la cordura y de la sensatez en esta
situación, ya que ella conoce de la atracción de la Novia con Leonardo y desea
evitar una tragedia.
Mas pese a las
advertencias de la Criada, la Novia ni
se inmuta por estas señales, demostrando su desapego al compromiso del
matrimonio. La Novia luego le dice a Leonardo porque es que duda de su pureza,
porque es que se burla de ella y dice también si lleva “intención”, con esto se
refiere a si acaso él tiene la intención de reclamarle su pureza, su
virginidad, la cual está destinada exclusivamente a su prometido.
Leonardo lo
niega y se acerca a ella (esto simboliza la cercanía que alguna vez tuvieron en
su amorío pasado). Y le dice a la Novia que ella debería saberlo porque ella lo
conoce, aquí Leonardo le quiere hacer recordar su antigua relación apasionada a
la Novia. Después hay una metáfora con la cual Leonardo le pide a la Novia que
recuerde lo que fueron. Para luego cerrar su diálogo con otra metáfora “Pero dos bueyes y una mala choza son casi
nada” donde Leonardo transmite cómo es que ella prefirió irse con el Novio
ya que él posee las tierras y las riquezas que él nunca pudo ofrecerle. En esa
metáfora los bueyes representan la posesión y respaldo económico (antiguamente
las riquezas se medían en cabezas de ganado). Leonardo dice que “Esa es la
espina” refiriéndose al problema que tuvo su relación.
Después la
Novia pregunta su verdadera razón por la que él está aquí y Leonardo le miente
diciendo que para ver por su casamiento, a lo que la Novia le responde que ella
vio el suyo. En estos diálogos es importante destacar que cada uno, la Novia y
Leonardo, vieron como su amante se termina casando con otra persona. Además se
aprecia en este diálogo la alteración de la Novia ante la presencia de
Leonardo, ya que esta está gritando (signo de exclamación presenta en cada
diálogo de la Novia en esta sección).
Leonardo con
un pleonasmo procede a través de una metáfora a relatar cómo es que la Novia lo
tiene prendado, también se refiere a cómo es que las ataduras de Leonardo (su
matrimonio) fue causado por la Novia y como es que no ha superado su apasionada
relación y que ella es la causante de esto. Luego dice, con otra metáfora, que
él es un hombre de orgullo, ya que él puede morir mas no le pueden escupir,
(cuando eres escupido por alguien es una deshonra). Luego personifica a la
plata diciendo que esta le escupe, en esa parte de su diálogo Leonardo se refiere
a como la diferencia entre su riqueza y la del Novio arrasó por sobre la suya,
razón por la cual la Novia está con el Novio.
La Novia niega
lo anteriormente dicho, pero Leonardo la interrumpe diciendo que no desea
hablar producto de que es un “hombre de sangre, y no quiero que todos
estos cerros oigan mis voces”. Cuando Leonardo dice que es un hombre de
sangre es una metáfora para decir que es un hombre noble, auténtico y de buena
clase, y además personifica a los cerros, los que representan al pueblo, ya que
el escuchar es propio del hombre. En esta frase de Leonardo se aprecia cómo es
que el sabia claramente que lo que él estaba haciendo está prohibido.
La Novia, la
cual está enojada producto de esta riña entre “pareja”, dice que sus gritos
ensordecerán los suyo que no debía preocuparse. Como se ha apreciado desde el
comienzo del fragmento hasta este punto la Novia se siente molesta por la presencia
de Leonardo, ya que a ésta le enfurece que Leonardo venga a estorbar su
matrimonio cuando ella tuvo primeramente que verlo casarse con otra mujer.
La Criada
interviene nerviosa porque sabe lo que ocurrió entre ellos dos y teme lo peor,
está atenta a la puerta por si llega más gente ya que esta escena no podía ser
vista por nadie más producto de la traición que vislumbraba la escena.
En el
siguiente diálogo se recalca lo que mencionamos anteriormente, el hecho que a
la Novia le molestara que el Novio viniera a estorbar en su boda. Utiliza una
metáfora con la cual expresa la rabia que recorre su cuerpo “me calienta el
alma”.
Leonardo finge
inocencia al preguntar si es que ya no le era permitido hablarle. A lo que la
Criada se le adelanta a la Novia, al afirmar que efectivamente ya no podía
hablar con ella. Como se puede apreciar en las intervenciones que ha hecho la
Criada en el fragmento, ella está tratando de evitar la calumnia que sería la
infidelidad de la Novia al Novio, frente a la innegable atracción que hay entre
la Novia y Leonardo. La Criada trata de conseguir algo que en la mayoría de las
tragedias griegas ocurre, que tratar de evitar la tragedia planteada por el
destino, mas esta no puede evitarla producto de que en estas obras, al igual
que en las tragedias griegas clásicas, es imposible para el hombre escapar de
su destino.
Leonardo
cambia drásticamente el tema de conversación y comienza a referirse
directamente a la antigua relación entre él y la Novia. Leonardo nos narra que
desde el instante en que se casó, el comenzó a preguntarse quién tuvo la culpa.
Aquí se ve como Leonardo desde un comienzo nunca quiso casarse, y por tanto
busca la razón (la culpa) por la cual se terminó separando de la Novia y
casándose con su mujer. De hecho la culpa es una figura tan importante en este
diálogo que Leonardo la personifica, describe cómo es que cuando creía encontrar
la culpa “sale una culpa nueva que se
come a la otra”, refiriéndose a que la culpa siempre estaba presente no
importa cuánto se lo plantea siempre iba encontrando más “culpa”.
La Novia procede en su diálogo y nombra la
figura del caballo. El caballo en esta obra representa a Leonardo, y la figura
del caballo en las obras de García Lorca
representa la masculinidad, el salvajismo, la pasión y una voluntad
estremecedora. La Novia luego relaciona el caballo (masculinidad) con la
siguiente metáfora “un hombre con su caballo sabe mucho y puede mucho para poder estrujar a
una muchacha metida en un desierto”, con esto se refiere a que el caballo
(masculinidad) es eficaz en cautivar a una mujer que está desamparada (lo que
ocurrió seguramente con la Novia). La Novia recalca que ella ahora es diferente
a esas mujeres, ella tiene orgullo, y por tanto no va a rogar por la compañía
de este hombre a caballo. Sino que ella se casará. Mas también dice que con un
hombre “a quien tengo que querer por encima de todo”, esto nos da a
entender que a la Novia no le nace el amor por el Novio sino que está obligada
a quererlo producto del matrimonio (ya que utiliza la palabra tengo).
Leonardo le
responde “el orgullo no te servirá de nada”, con esto se refiere a que
igualmente va a someterse a él, está diciendo que el casarse no cambiará las
cosas (se entiende esto ya que la Novia se refiere a el matrimonio como el
orgullo). Y procede a acercarse a la Novia, la cual responde instintivamente
diciendo le que se aleje, producto de la tentación que él causa en ella.
En el
siguiente diálogo hay una metáfora cuando Leonardo le dice a la Novia que
“Callar y quemarse es el castigo más grande que nos podemos echar encima”,
refiriéndose a cómo es que el negar la atracción entre los dos solamente les
causa penurias. Luego hay una repetición y metáfora en “¿De qué me sirvió a mí el orgullo y el no mirarte y el dejarte
despierta noches y noches?”, aquí Leonardo él se está refiriendo a de que
le sirvió a él el casarse (“mi orgullo”), si finalmente no pudo secarse de los
pensamientos la figura de ella que lo seguía noche tras noche. Después dice que esto no sirvió de nada si no que
avivó la pasión que él sentía por la Novia. Leonardo le dice entonces a la
Novia que no se confunda, que no importa el tiempo que pasase la pasión entre
ellos siempre va a estar presente y nada podrá encubrir eso, ya que su relación
es una atracción irresistible. Cuando dice “cuando las cosas llegan a sus
centros no hay quien las arranque” Leonardo quiere dar a entender que cuando se
llega hasta cierto punto en algo (en este caso la relación entre Leonardo y la
Novia) no hay quien las pueda parar, es decir que no hay vuelta atrás.
La Novia
escucha esto temblando de lujuria, producto de la tentación que le produce la
figura de Leonardo. La Novia trata de no escuchar las palabras de Leonardo por
que la tientan. Luego hay comparación cuando dice “es como si me bebiera una botella de anís” y también cuando dice “y me durmiera en una colcha de rosas”, aquí
la Novia se refiera a la sensación que le produce Leonardo a ella, y como se
puede ver esta imagen que nos forman es de pasión, lujuria, y placer, una
pasión que embriaga (botella de anís) a la Novia, junto con la imagen de las
rosas a las que se les da una connotación sexual. Luego dice que la pasión es
tan fuerte que la arrastra hasta ahogarla o sofocarla, pero que pese al daño
que le hace ella no puede resistirse a esta pasión.
La Criada que
ve en el estado en el que está la Novia agarra a Leonardo y le dice que se
marche. A lo que él asiente diciendo que no se preocupara que no lo iba a ver
hablando más con ella, en el fondo está diciendo que aquí se zanjaba su
relación con la Novia, lo que más adelante en la obra se demuestra que es
falso, ya que su relación no podía escapar del destino.
En tanto la
Novia dice que se sentía como una loca, ya que está loca de pasión y loca por
querer estar con Leonardo, y producto de reprimir la pasión prohibida que
siente por Leonardo dice, por medio de una metáfora, que tiene el corazón
podrido. Y que pese a que la presencia de Leonardo la hería y distorsionaba su
corazón, ella igualmente está “quieta por oírlo, por verlo menear los brazos”,
lo que significa que ella se da cuenta de su dependencia a Leonardo y cómo es
que realmente añora estar con él.
Leonardo
finalmente desea finalizar esta conversación dice que todo ya fue dicho y lo
hecho, hecho está y por tanto que las cosas sucedan como debe ser (Yo me case
cásate tú ahora). Lo que la Criada afirma para enfatizar el hecho de que las
cosas ya están fijadas y no se deben cambiar ni interferir.
Finalmente el
fragmento termina cuando se da inicio a los cantó en pos del despertar de la
Novia el día de su boda.
En conclusión
en este fragmento se puede apreciar el acto que va a finalmente desencadenar la
tragedia de la obra de Lorca, que es la indecisión de la Novia y
principalmente, la férrea pasión que esta sentía por Leonardo. También a partir
de la figura de la Criada se puede comprobar cómo es que en las tragedias clásicas
pese a que los personajes constantemente tratan de evitar que ocurra la
tragedia estos no pueden ir en contra del destino. Además es en este fragmento en donde se
empieza a atisbar la posible infidelidad o traición de la Novia hacia el Novio,
es decir un presagio de la tragedia. Junto con lo anteriormente mencionado vale
la pena destacar la forma en que la poesía (figuras literarias) es aplicada en
el teatro para crear una imagen simbólica embellecida en torno a los personajes
y sobre los personajes.